Ficha - Arthur Kirkland

"Im an englishman in NewYork" - "Alfred, i dont hate you" - "¡Stupid americans!" - "Im a bloody british gentleman"

Personalidad

Se podria decir que Arthur es algo tsundere, es facil hacerlo enojar y no soporta a las personas infantiles e inmaduras, es alguien un tanto maduro aunque suele ser muy sarcastico y un tanto cinico, pero en el fondo es una buena persona que se averguenza fácilmente.

Le cuesta bastante relacionarse con las personas hasta el punto en que miente diciendo que no necesita amigos, aunque en el fondo le gustaría como mínimo tener un amigo o dos, con los cuales hablar de las cosas que le gustan y tomar té por las tardes.

Odia que lo traten de loco porque aveces lo ven hablar solo, pero en realidad el habla con hadas y criaturas fantásticas, por lo que si lo vez hablando solo, es porque esta hablando con ellas, sin embargo, realmente no se sabe si son reales o simples productos de su imaginacion.

Físico

Arthur es de una estatura normal y posee ojos color esmeralda, su cabello anda siempre desordenado y es de un rubio claro.Posee unas cejas muy curiosas que parecen haber sido dibujadas por un marcador negro, aunque no le agrada mucho que le digan algo acerca de sus cejas.

Suele usar ropa que usarían personas más mayores, por lo que las personas aveces se confunden debido a que su aspecto es de alguien muy joven pero su ropa es del tipo que usaría un abuelo o incluso alguien mucho mas viejo, mas a el no le importa lo que opinen los demas.

Historia

Arthur Kirkland nació hace dieciséis años en London, Inglaterra, bajo el manto de una familia de alta clase social. Tiene cuatro hermanos mayores, todos y cada uno de ellos lo odian, siempre lo trataron como basura porque su madre murió dando a luz a Arthur, por lo tanto, siempre culpan al menor de los Kirkland y este jamas se quejo, porque el también se sentía culpable, incluso si no era su culpa.

Al cumplir once años, llego a la casa un pequeño de diez llamado: Federick. El era el hijo de la nueva esposa de su padre, una mujer americana que por cuestiones de trabajo se habia tenido que quedar en los Estados Unidos, así que mando al pequeño a quedarse con su padre y el resto de los hermanos Kirkland. Ninguno le dio mucha importancia, no lo odiaban como a Arthur, mas tampoco les importaba el bienestar o la vida de ese pequeño de ojos azules, en cambio, el menor de los Kirkland lo vio como un hermano menor, un amigo, alguien a quien enseñar lo maravilloso de la magia y del mundo. Si, esa era la otra diferencia de Arthur con sus hermanos, el podía hacer magia, el porque sus hermanos no podían y el sí es todo un misterio, su padre piensa que es por que uno de sus antepasados fue un poderoso mago, mas esa es una historia para contar otro día.

Pasaron cuatro años, y la relación entre Federick y Arthur se fue haciendo más fuerte, hasta que ambos comenzaron a darse cuenta de que el cariño que sentían el uno por el otro, superaba la amistad. Antes de que alguno de los dos pudiera poner en claro sus sentimientos, Federick tuvo que volver a los Estados Unidos, ya que su madre estaba enferma y era el único que podía cuidarla. Desde entonces, no se volvieron a ver, pero eso no fue lo que dolió más, sino que parecía que, quien una vez fue su hermano pequeño, realmente se quería ir, se lo dejo bien claro con sus ultimas palabras: "Arthur, soy libre. Ya no soy tu hermano menor, escogo la libertad", eso le dio a entender que Federick no lo quería para nada como el, todo había sido mentira, todo una farsa.

Jamas volvió a ser el mismo. Arthur se rompió, esas pocas ganas de vivir que tenia, se desvanecieron, si no fuera porque era inmortal estaría muerto por no haber comido por meses, por haberse encerrado en su habitación, llorando, hundido en la depresión. Incluso trato usando libros de mágica, pero ninguno era lo suficientemente útil, algunas veces lograba volver al pasado pero siempre algo ocurría, como si hubiera una maldición y Federick muriera cada vez que retrocedía a ese momento, por lo general, era atropellado por un camión luego de decir sus ultimas palabras. Esto traumatizo a Arthur aun más, así que se dio por vencido.

Al cumplir los dieciséis, escucho de una academia llamada "Magic School", que se encontraba en una tierra lejana y desconocida, un lugar escondido, lleno de magia, y mas importante aun: con un artefacto que te permitía retroceder en el tiempo. No lo pensó dos veces y se fue allí.

Datos Adicionales

- Tiene un acento ingles muy marcado y cuando esta muy enojado comienza a insultar en ingles olvidándose que no lo entienden pero eso no le importa mucho realmente.

Habilidades:
-Puede usar magia negra, mas debe estar leyendo el conjuro de un libro, el cual suele siempre llevar con el.
-Le encanta lanzar maldiciones a las personas que no le agradan, pero no son muy efectivas, así que no seria algo de que preocuparse.